jueves, 29 de marzo de 2012

El elefante fotógrafo


Había una vez un elefante que quería ser fotógrafo. Sus amigos se reían cada vez que le oían decir aquello:
- Qué tontería - decían unos- ¡no hay cámaras de fotos para elefantes!
- Qué pérdida de tiempo -decían los otros- si aquí no hay nada que fotografíar...
Pero el elefante seguía con su ilusión, y poco a poco fue reuniendo trastos y aparatos con los que fabricar una gran cámara de fotos. Tuvo que hacerlo prácticamente todo: desde un botón que se pulsara con la trompa, hasta un objetivo del tamaño del ojo de un elefante, y finalmente un montón de hierros para poder colgarse la cámara sobre la cabeza.
Así que una vez acabada, pudo hacer sus primeras fotos, pero su cámara para elefantes era tan grandota y extraña que paracecía una gran y ridícula máscara, y muchos se reían tanto al verle aparecer, que el elefante comenzó a pensar en abandonar su sueño.. Para más desgracia, parecían tener razón los que decían que no había nada que fotografiar en aquel lugar...
Pero no fue así. Resultó que la pinta del elefante con su cámara era tan divertida, que nadie podía dejar de reir al verle, y usando un montón de buen humor, el elefante consiguió divertidísimas e increíbles fotos de todos los animales, siempre alegres y contentos, ¡incluso del malhumorado rino!; de esta forma se convirtió en el fotógrafo oficial de la sabana, y de todas partes acudían los animales para sacarse una sonriente foto para el pasaporte al zoo.

Autor..

¿ESTÁS DISPUESTO A ABANDONAR TUS SUEÑOS POR LA BURLA DE OTROS?

viernes, 23 de marzo de 2012

El misterio de la moneda desaparecida


 La urraca se dio cuenta de que le faltaba una de sus monedas más preciadas, e hizo llamar a los mejores detectives del bosque, la Liebre y el Ratón. El ratón era algo más listo y sagaz que la liebre, así que sus pistas y razonamientos le llevaron pronto al gran laberinto de túneles bajo el bosque. Al entrar, vio al señor topo, pero como el ratoncillo era muy tímido, no se atrevió a decirle nada, y anduvo por allí buscando la moneda. La liebre también era un gran detective, así que poco después llegó allí, y como no era nada vergonzosa, lo primero que hizo fue preguntarle al topo si sabía donde estaba la moneda. El topo resultó estar encantado de guiarle porque la moneda llevaba tiempo molestándole, y finalmente la liebre se llevó la recompensa.
Pero el ratoncillo, que vio suceder todo aquello, aprendió mucho, y desde entonces nunca dejó que la timidez le estropeara su buen trabajo, y se convirtió en el mejor detective del bosque

Autor..

¿HASTA DONDE TE PUEDE PERJUDICAR TU TIMIDEZ?
LEE Y MEDITA EN ESTE LINDO PARRAFO DEL LIBRO DE JOSUE 1:9
9 Mira que te mando que te esfuerces y seas valiente; no temas ni desmayes, porque Jehová tu Dios estará contigo en dondequiera que vayas.

viernes, 16 de marzo de 2012

Popi el alpinista


Popi el alpinista era famoso por sus intentos de escalar la gran montaña nevada. Lo había intentado al menos 30 veces, pero siempre había fracasado. Comenzaba la ascensión a buen ritmo, con la vista puesta en la nieve de la cima, pensando en la maravillosa vista y aquel sentimiento de libertad. Pero a medida que las fuerzas le fallaban, bajaba los ojos, y miraba más a menudo sus desgastadas botas, y finalmente, cuando las nubes le rodeaban, y comprendía que ese día no podría disfrutar de la vista, se sentaba a descansar, aliviado, para comenzar el descenso de vuelta la pueblo, pensando en las bromas que tendría que volver a soportar.
Una de aquellas veces subió acompañado por el viejo Chisco, el óptico del pueblo, que fue testigo del fracaso. Fue el propio Chisco quien más animó a Popi para volver a intentarlo, y le regaló unas gafas oscuras especiales; "si comienza a nublarse, ponte estas gafas, y si comienzar a dolerte los pies, póntelas también; son especiales, te ayudarán".
Popi aceptó el regalo sin darle importancia, pero cuando volvió a sentir el dolor en los pies, lo recordó se puso las gafas. El dolor era muy molesto, pero a través de los cristales podía seguir viendo la cumbre nevada, así que siguió avanzando. Como casi siempre, la mala suerte volvió a aparecer en forma de nubes, pero esta vez eran tan ligeras que podía seguir viendo la cumbre a través de las nubes.
Así siguió Popi escalando, dejó atrás las nubes, olvidó sus dolores y llegó al fin a la cima. Merecía la pena. Su sensación de triunfo fue incomparable, casi tanto como aquella maravillosa vista, custodiada por el silencio y con la montaña rodeada de un denso mar de nubes. Popi no recordaba que fueran tan espesas; entonces miró las gafas cuidadosamente, y lo comprendió todo: Chisco había grabado una difusa imagen en los cristales con la forma de la cumbre nevada, que sólo podía percibirse al dirigir los ojos hacia arriba. Chisco había comprendido que en cuanto Popi perdía de vista su objetivo, se dejaba llevar y perdía la ilusión por seguir subiendo.
Comprendió entonces que el único obstáculo para llegar a la cima había sido su desánimo, el dejar que la imagen de la montaña desapareciera entre los problemas, y agradeció a Chisco que mediante un engaño le hubiera hecho ver que sus objetivos no eran imposibles, y que nunca se habían movido de su sitio.

Autor..

EL PEOR ENEMIGO DE LLEGAR A NUESTROS OBJETIVOS SOMOS NOSOTROS MISMOS, PONEMOS CIENTOS DE EXCUSAS. ES HORA QUE DESPERTEMOS Y CREAMOS QUE SOMOS CAPACES. GRITALO CON FUERZA: ¡¡¡ YO PUEDO !!!

martes, 13 de marzo de 2012

Cultura en el Club Yo Puedo


Se suma desde hoy un espacio donde podrás aprender muchas cosas. Curiosidades, origen de las palabras, imagenes interesantes, etc. Todo para que puedas crecer como persona. Si tienes alguna idea no dudes en compartirla.

SABÍAS QUE...


T I T A N I C 
En 1898, catorce años antes de que el Titanic zarpara, el marino estadounidense Morgan
Robertson escribió una novela llamada Futilidad, sobre un lujoso barco que se hunde en su viaje
inaugural al chocar contra un iceberg en el Atlántico. La nave, era la más grande del mundo,
con un casco triple e imposible de hundir. Sus pasajeros eran la crema y nata de la aristocracia y
además, no había suficientes botes salvavidas.  El nombre de la embarcación era, créalo, El Titán.
 
 
LA IZQUIERDA y  LA DERECHA
¿Sabías a qué se debe la denominación de DERECHA E IZQUIERDA de las tendencias políticas?
 En la Asamblea francesa de 1789, los conservadores se sentaron a la derecha del presidente
de ésta  y los radicales lo hicieron a la izquierda. 
 
 
 
 
 
ORIGEN DE LAS PALABRAS
 
 Alarma
Se dice que en tiempos de la presencia musulmana en española, los iberos permanecían
dentro de recintos amurallados, dedicados a sus labores, pero con las armas apiladas al
centro del fuerte. Cuando el vigía avistaba musulmanes gritaba 
¡Al arma!  (corran a tomar sus armas para defendernos).
 
 
 
Sandwich
John Montagu (1718-1792) cuarto conde de Sandwich (Inglaterra) era un jugador empedernido y pasaba muchas horas delante de la mesa de juego. Un día a la hora de la comida estaba tan metido en el juego que le pidió a su sirviente le trajera "cualquier cosa para comer ahí mismo". Al rato, el criado se presentó con una bandeja de alimentos. El conde, sin abandonar su puesto, cortó unas rodajas de "roast beef", las colocó entre rebanadas de pan, y comió el emparedado sin interrumpir el juego. Tan orgulloso se sentía lord Sandwich de su creación que no dudó en mencionarla en su testamento, como el mejor legado que dejaba a su país. 
 
HASTA LA PRÓXIMA...
 

martes, 6 de marzo de 2012

El origen de la felicidad


Había una vez un niño que era muy feliz, , aunque no tenía muchos juguetes ni dinero. Él decía que lo que le hacía feliz era hacer cosas por los demás, y que eso le daba una sensación genial en su interior. Pero realmente nadie le creía, y pensaban que no andaba muy bien de la cabeza. Dedicaba todo el día a ayudar a los demás, a dar limosna y ayuda a los más pobres, a cuidar de los animales, y raras veces hacía nada para sí mismo.
Un día conoció a un famoso médico al que extrañó tanto su caso, que decidió investigarlo, y con un complejo sistema de cámaras y tubos, pudo grabar lo que ocurría en su interior. Lo que descubrieron fue sorprendente: cada vez que hacía algo bueno, un millar de angelitos diminutos aparecían para hacerle cosquillas justo en el corazón.
Aquello explicó la felicidad del niño, pero el médico siguió estudiando hasta descubrir que todos tenemos ese millar de angelitos en nuestro interior. La pena es que como hacemos tan pocas cosas buenas, andan todos aburridos haciendo el vago.
Y así se descubrió en qué consiste la felicidad, y gracias a ese niño todos sabemos qué hay que hacer para llegar a sentir cosquillitas en el corazón

Autor.. Pedro Pablo Sacristán

UN LINDO CUENTO Y UNA GRAN ENSEÑANZA, EL AYUDAR A OTROS NOS LLENA DE FELICIDAD.